ENTRE LA TARDE Y LA NOCHE FLORECEN LAS REALIDADES EN CAUCAGÜITA...

Jesse Chacón promete gestionar canalización de “La Auyamita”

En la parte baja de Caucagüita, todo se reconoce y nombra por kilómetros; muchas personas tienden a confundirse con los nombres de los barrios, que son muchos, pero se ubican rápido localizando el kilómetro donde se encuentran.

En ese sector de esta super poblada parroquia del municipio Sucre, el candidato Jesse Chacón, el candidato que visita los barrios entre la tarde y la noche, inició su recorrido de campaña, por momentos a pie y otras en moto.

Desde “El Carmen” hasta “La Y” – le dicen YE – el problema que más preocupa a la gente tiene que ver con la canalización del río “La Auyamita” el mismo que tiene cara de “quebradita” pero que cuando crece, inunda viviendas, socava bases y hunde calles.

Este drama que vive la gente desde hace años, fue planteado casi al bajarse de la moto, al candidato bolivariano y como el aspirante es intenso y no se conforma con una versión hecha mil voces a gritos, él mismo decidió comprobar la magnitud de los hechos y entre inspección e inspección, le acompañamos desde el kilómetro 12 hasta casi el 16.

Chacón anunció que sostendrá una reunión con la ministra del Poder Popular para el Ambiente, para plantear el caso. Su estrategia consiste en elaborar un proyecto, porque ya está hecho el diagnóstico, para canalizar la quebrada que parte desde el barrio San Isidro.

“A partir de este momento, estoy asumiendo un compromiso con la comunidad, porque de nada vale comenzar en esta parte de Caucagüita obras de envergadura, si primero no atendemos este caso”. Ciertamente, por efecto de las aguas, en el barrio Hortensia Hurtado, por ejemplo, la gente está harta de los estragos que provoca la crecida de “Auyamita” – como le dicen

Porfirio tiene 26 años viviendo en la zona, él y su familia son muy humildes, al punto que el consejo comunal decidió incluirlos en el plan de atención de 24 viviendas que reparan y construyen para los más necesitados. Desde la ventana de su cuarto se puede observar todo el peligro que acarrea la quebrada; la pared es testigo de las marcas que deja el agua cuando sube. Omar Meza, dirigente vecinal, dice que a lo largo del barrio el panorama es idéntico.

En El Carmen, Jesse también entró en la escuela “Antonio José de Sucre” donde la comunidad le pidió que verificara las filtraciones que la afectan. El proyecto de reparación ya está listo y aprobado, sólo están esperando los recursos.

Le preguntamos a una de las mujeres que seguía al candidato: ¿Por qué ustedes llevan a Jesse a todos esos lugares para que vea los problemas? ¿Ustedes creen que él ahora puede resolverlos?: “Mire, si no puede él, nosotros sabemos que va a gestionar las respuestas con alguien del gobierno; ese es hombre de Chávez y vino para ayudarnos”

La campaña del aspirante a la alcaldía de Sucre es diferente, él mismo lo ha dicho. Apartando los momentos de algarabía, música, consignas y saludos que envuelve este evento, la gente lo espera llegar para conversar desde temas personales, hasta dramas colectivos.

Jesse y Lesami, su esposa que lo acompaña por todas partes, con paciencia entran y salen de las casas; las personas les abren las puertas de sus casas y a veces la “doñita”, la abuela o la madre, se lleva al candidato para su cocina, lugar excelente para cualquier conversa, mientras Lesami espera en la salita y sonríe con comprensión. Es una dinámica distinta, es una confianza automática que nace con solo verlo en persona; todos quieren que sea “su visita”.

En El Placer, donde habitan 370 familias, “Auyamita” socavó las bases de la única cancha deportiva y se hundió hasta la mitad, solo queda una parte de las gradas que alguna vez fueron asiento de un público que asistía a los encuentros deportivos.

“Jesse, tu hablas de ejes deportivos, ¡ayúdanos con esto muchacho!”. Una petición dolorosa que partió de un hombre no tan mayor, que hace mucho tiempo vio a sus hijos jugar allí.

Realmente hasta que no se resuelva el caso de la canalización, montar una ofensiva de reparación de obras afectadas, a la larga resultará pérdida porque el río volverá dañarlas. Realidad es que en esta parte baja de Caucagüita, al igual que en casi todas las barriadas de Sucre, no se planificó un urbanismo y las construcciones se hicieron sin tomar previsiones ante los riesgos y esta es una de las consecuencias.

Durante todo el recorrido que hizo el candidato bolivariano durante 5 horas y que terminó a las 10:00 de la noche, realizó cuatro asambleas en plena calle; en las últimas tres, la lluvia acompañó los actos. ¡Y la gente ahí! “Es que barrio no se esconde” – dijo un muchacho que en su moto acompañaba al candidato.

Ya íbamos por el kilómetro 14 de la carretera Petare-Guarenas, cuando se bajó de la moto, para entrar en el sector “Ramón Brazón” donde una vez más verificó la quebrada que se llevó la calle interna. A partir de ese momento, seguimos hasta el final a pie, porque era mucha la gente en la calle, que por lo menos quería darle la mano. De la carretera al barrio, hay que cruzar una pasarela de concreto, que parece una gelatina, ¡está a punto de derrumbarse! Y la gente pidió ayuda.

Jesse en una de sus intervenciones dijo que “todo revolucionario debe ser crítico” y es verdad; en este lugar de Caucagüita hay muchos problemas por errores y omisiones cometidas, pero también es cierto, que las misiones funcionan, los CDI también, los consejos comunales están operativos y estos son resultados de la revolución. Antes de ella ni imaginarse que un médico viviera y atendiera en el mismo barrio.

Entre 19 de Marzo y Araguaney, todos los profesionales que laboran en el Centro de Asistencia Médica Integral se ubicaron junto con los vecinos al borde de la carretera para saludar al candidato. Allí estaban los médicos cubanos a quienes Chacón les dedicó un agradecimiento “infinitivo por todo lo que hacen para ayudarnos”. Ya no importaba que lloviera, el camión de música colocaba “puro CD de salsa” y la gente bailaba por la vía.

En la “YE” desde los carros, la gente se salía a medio cuerpo por las ventanas para saludarlo; en el SRI lo esperaron y le mostraron el proyecto que tienen para ampliar la obra y los servicios.

El final del recorrido fue en el sector de Los Trailers, para llegar hay que subir una calle muy empina que cansa.¡Cómo será la gente que la sube y baja diariamente!

Frente a la Casa de la Alimentación 657, Jesse Chacón hizo su última asamblea con reflexiones contundentes sobre el tema de la seguridad y con un anuncio que cerró con broche de oro la noche buena; “el 23 de noviembre se acaba la impunidad en Caucagüita, ¡Por qué ya basta!”. El aplauso no se hizo esperar, la gente clama por días de paz y con Jesse como que ¡llegó la hora!